Optimismo y futuro. Es lo que llevaba bajo el brazo al presidente del Força Lleida, Albert Aliaga, en su comparecencia de este miércoles ante los medios de comunicación de la ciudad para valorar la próxima temporada. Optimismo y también certezas; algunas importantes. La que más, que el club está preparado, si finalmente no hay alternativa, para afrontar un paso por la LEB Plata tan fugaz como fulgurante –“hacer un Espanyol”, ha dicho Aliaga- y manteniendo un presupuesto como el de este último curso (de unos 800.000 euros) para conseguirlo. Pero éste es un escenario que el máximo dirigente leridano no considera que sea el más realista ahora mismo; Y es que Aliaga ha anunciado que el club ha puesto "en manos de un bufete de abogados especializado" la defensa de los derechos que considera tener para seguir un año más en la categoría. En este sentido, el presidente ha revelado que este miércoles “se ha comunicado a la FEB que no queremos que nos devuelvan el aval de 180.000 euros depositado para jugar en LEB Oro, porque haremos todo lo que convenga y lucharemos hasta el final hasta el 2 de julio (último día de inscripción) con todas las armas federativas y judiciales. Creemos que la FEB debe estar al servicio de los clubs”, ha dicho, sin ir prudentemente más allá en lo que se refiere a las estrategias a seguir en el ámbito legal. Eso sí, ha advertido que si fuera necesario ir por esta vía -una vez agotada la federativa- el club podría pedir "la suspensión cautelar" del inicio de la competición hasta que se resolviera el contencioso. El club leridano propone, con el apoyo de la Federación Catalana y de su presidente Ferran Aril, una remodelación de la LEB Or “con 2 grupos de 12 equipos. Creemos que deben subir los equipos de Plata, pero que no debería haber descensos en Oro”. Y ha remachado que “nos sentimos castigados. Lleida merece un proyecto sólido, y el nuestro lo es aunque deportivamente no ha salido bien. En el resto, hemos cumplido con todo. Pocos lo han hecho”. De hecho, Aliaga ha destacado que "el club cerrará la temporada sin déficit" a pesar de la complejidad del curso debido a la pandemia. Esto será posible gracias al apoyo de "más de 500 abonados, cerca de 150 empresas -25 de ellas nuevas-, las instituciones, las familias de la base, y los trabajadores y trabajadoras del club" para los que el presidente también ha querido tener unas palabras especiales de agradecimiento.
Sin embargo, el descenso por la vía deportiva se consumó en Melilla, y Albert Aliaga lo asume: “No hemos bajado por el Cóvido. El Còvid nos hizo mucho daño en un momento clave de la temporada, pero había partidos que debían ganarse (Burgos, Ourense, Melilla) y no lo hicimos. Hemos bajado por méritos propios”, y eso tiene consecuencias: En cuanto a la plantilla para la próxima temporada, sea en Oro o sea en Plata, se hará “fuego nuevo”. En cuanto a las altas, la primera pieza confirmada es el canterano Albert Lafuente, cedido esta última temporada al Clavijo de LEB Plata donde ha brillado con intensidad y donde ha sido uno de los mejores del equipo. Y en cuanto al entrenador, Aliaga espera poder cerrar el nombre del nuevo técnico “la próxima semana”.