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Continuar con opciones a todo exigía ganar hoy en el Multiusos de Cáceres y, pese a que en el segundo período las cosas parecían girarse en contra, el ICG Força Lleida ha sellado una nueva victoria alcanzando los 100 puntos.

La novedad de la noche era la aparición de Hasbrouck sobre pista después de unas jornadas en el banquillo por molestias. Empezaba anotador el equipo extremeño desde el triple, pero el ICG Força Lleida ponía tres marchas de más y se enganchaba en el electrónico con Kenny anotando desde la línea exterior y los jugadores interiores haciéndolo bajo canasta. Un balón robado de Varela, que terminaba en dos puntos, obligaba a Arturo Álvarez a pedir el primer tiempo muerto a 3:49 del final del primer cuarto con el 14-19. La reanudación era puro estilo leridano con Kuath dominante en el rebote y en ataque, y Brito y Lobo poniendo un triple por banda para situarse a 15 al final del primer período (16-31).

Los locales daban la vuelta a la dinámica y se situaban sólo a 6 puntos del ICG Força Lleida con un juego dinámico, rápido y acierto desde el triple, lo que carecía de la banda leridana en el primer tramo del segundo periodo. Lo detenía Gerard Encuentra con el 33-39 y movía banquillo poniendo a Varela a dirigir el juego, quien seguía bien conectado con Kuath para asistirle y que anotara de dos. Sin embargo, Cáceres no fallaba absolutamente nada y se ponía sólo uno por debajo en unos minutos que los leridanos no sabían cómo detener. Simeunovic y Varela daban una brizna de aire al luminoso para ir al descanso 41-46.

Poco a poco se llenaba el electrónico de nuevo con una buena defensa y Simeunovic de protagonista. Anotaba 6 puntos consecutivos, solo y bajo canasta, ponía el +12 en el marcador (47-59) y Arturo Álvarez pedía tiempo muerto para buscar recuperar la mejor versión de su equipo. Pero Simeunovic seguía a la suya que, dejando a un lado que se cargaba con la cuarta falta personal, seguía siendo el puntal anotador con un triple y dos puntos bajo canasta.

Diez últimos minutos ya diez de ventaja de los leridanos, que no teníamos suficiente. Lobo y Hasbrouck, que tienen las medidas prisas en el Multiusos de Cáceres donde jugaron, ponían la directa con sus triples. Con tres minutos jugados y el marcador 58-74 detenía el juego el conjunto local. Varela de tres ponía el 61-81 a poco más de cinco minutos para el final del partido. Últimos minutos de trámite con un Jaume Lobo triplista y el luminoso final de 77-100 para seguir soñando.

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