Después de un mes paradas nuestras cadetes volvían a jugar y lo hacían contra el Femenino Maresme, rival que en la primera vuelta les había plantado cara en un partido que no se decidió hasta el último cuarto.
El primer cuarto estuvo dominado por la gran presión y defensa de las locales y por el desacierto de cara a canasta, aun así da una renta cómoda. El segundo cuarto se desarrolló de la misma forma que en el primero hasta los 6 minutos donde las visitantes contrarrestaron el ritmo de las leridanas y devolvieron el parcial, dejando el parcial casi igualado.
En la segunda parte se igualó el partido por el aumento de ritmo visitante y el aumento del desgaste local, puesto que las locales han estado toda la semana entrenando con pocas jugadoras por la COVID.
Por último victoria y buenas sensaciones en defensa. Sin embargo, tenemos claro el foco de trabajo en el ataque estático y recuperar el buen tono físico.