El ICG Força Lleida cierra una primera vuelta ilusionante alargando la racha de 8 victorias en los últimos 9 partidos. El primer equipo se ha sumado a la celebración de la base leridana con una segunda mitad espectacular después de una primera parte igualada. Los de Gerard Encuentra han regalado algunos de los mejores minutos de la temporada durante el tercer cuarto y el Barris se ha convertido en una auténtica fiesta en el tramo final.
Simeunovic fue, un partido más, el encargado de abrir la veda con 6 de los primeros 10 puntos de los leridanos. El equipo ha salido a pista con ganas de hacer disfrutar a todos los jugadores de la base que hoy ayudaban a registrar la mejor entrada de la temporada. Los de Gerard Encuentra jugaban de memoria encontrando una y otra vez a Krutwig en la pintura, que volvía a ser el faro en ataque. Lobo cerraba un parcial contundente de los locales de 12-0 que daba una primera renta a los del Segrià.
Todos los jugadores entraban con ganas de dejar su impronta. Varela sumaba una canasta complicadísima a mano cambiada y Lobo clavaba el primer triple para medir el pulso del Barris. Aunque el Cáceres conseguía ajustar el marcador antes del paso por los banquillos, el conjunto extremeño no encontraba la forma de detener a Krutwig. El pívot estadounidense sacaba petróleo de cada jugada bajo el aro, mientras sus compañeros seguían sumando.
Los de Gerard Encuentra se han cargado muy rápidamente de faltas en el segundo acto, lo que ha aprovechado el Cáceres para ser más agresivo en ataque y recortar puntos. En unos minutos de estancamiento ofensivo, la buena circulación de balón fue el mejor remedio para reencontrarse con la anotación. Una jugada de auténtico malabarista de Varela ha cerrado una primera parte de lo más ajustada con un 41-39 en el descanso.
LLEIDA Y BASTA
Si la primera mitad había estado marcada por la igualdad, la reanudación ha sido un recital de los leridanos. Uno-mio de manual entre Krutwig y Brito adelantaba buenos presagios. Las buenas combinaciones se han convertido en la tónica general y el equipo ha sacado las garras en defensa para encallar a los extremeños en los 45 puntos. Un recital desde el perímetro ha completado la tormenta perfecta para los leridanos mientras que el Barris se divertía. Villar, Hasbrouck, Simeunovic y Matulionis anotaban de tres y hacían cada vez mayor la herida.
Cuando Krutwig juega, los niños sonríen. Y cuando Varela está de dulce, también. Al show constante del pívot estadounidense, se sumó el chileno con dos triples en los dos primeros balones que tocó en la segunda mitad. Y es que en el tercer cuarto (parcial de 32-12) ha entrado todo. ¡Incluso el Tiro Nayox! Una canasta desde el centro del campo de un aficionado que ha puesto de pie en el Barris.
El último cuarto ha sido un mero trámite para ambos equipos y una fiesta para los aficionados locales. Salía la luna llena y los aullidos resonaban por el Barris porque Jaume Lobo no tenía suficiente. 2+1 y una triple marca de la casa para continuar en la cacería de los 100 montones. Matulionis también acertaba de tres y el Varela-time no se detenía.
El Barris era una fiesta y los aficionados, con ganas de divertirse, reclamaban minutos por el junior Ibou Dabo. Gerard Encuentra aceptaba la petición e Ibou respondía de la mejor manera anotando sus primeros puntos en LEB Oro, que desataban la euforia en las gradas y el banquillo. La joven promesa burdeos se marchaba ovacionado por los suyos en una noche que recordará durante años. 95-71. Una nueva victoria del equipo más en forma de la liga. La racha sigue.
