Un par de horas antes de emprender el viaje hacia Alicante, donde mañana el ICG Força Lleida disputa la segunda jornada de la LEB Oro, el técnico Gustavo Aranzana ha pasado revista en el momento del equipo. Tras la derrota en la cita inaugural ante el Almansa, el entrenador ha dicho que el equipo está "bien" y que sigue "trabajando y mejorando", consciente de que "la liga será dura" y que "no será nunca fácil ganar partidos”. Aranzana ha dicho que afrontan el partido con mucha ilusión y ganas de llevarse la victoria del Centro de Tecnificación alicantino a pesar de que no será fácil, ya que el rival “es un gran equipo, mejor e incluso más completo que el del pasado año a pesar de haber cambiado piezas. Un favorito para estar arriba y conseguir el ascenso”. El coach admite que su conjunto todavía "debe mejorar mucho" y que hay jugadores que, por diferentes motivos "no están todavía en el 100%", pero también afirma tener "la seguridad de que jugaremos bien y que estaremos allí", con opciones de ganar, pese a admitir que el rol de favorito es por el Alicante. “Si hiciéramos una encuesta, yo creo que salvo nosotros, la mayoría de la gente diría que los favoritos son ellos” pero también recuerda que “esto a mí me da igual; nosotros viajaremos, nos cambiaremos, y se lo disputaremos. No tenemos miedo a nada”.
PREVIA J13. Un rival de máxima exigencia
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